Las ventas de Cava se incrementan un 6,5% en el año 2017.


A pesar de todos los boicots anunciados y las noticias pesimistas sobre todo lo que tenga de ver con Cataluña que se emiten desde la Prensa Española manipuladora el 2017 se  ha cerrado con un incremento en ventas de Cava  del 6,5%.


El crecimiento en el mercado exterior e interior en el último trimestre del año va a cerrar con una cifra récord de 252’5 millones de botellas, un 3% más que en el 2016, lo que se reproduce en un toral de 1.149 millones de euros, el 6.5% más que en el año anterior.

Lo que se traduce es que el Cava está creciendo en 3,2 millones de botellas en el mercado exterior llegando al récord de 162,2 millones de botellas vendidas, o sea un 2% más, Donde Alemania recupera la primera posición que perdió el año pasado, con un crecimiento del 10,5%.

El mercado interior  va a tener un crecimiento del 4,7% superando las 90 millones de botellas, cifra que no se obtenía desde el 2010.

De acuerdo a su naturaleza el cava tradicional es el que más se vende con 219 millones de botellas y un crecimiento del 1,95%, seguido del cava reserva con 28,6 millones de botellas y un crecimiento del 13,4% y por último el gran reserva con 3,9 millones de botellas vendidas el   6,6 % respecto al 2016.
 
Lo más relevante es el progreso que ha tenido el segmento del  cava gran reserva y los de Lugar Cualificado que van a cerrar el año con un crecimiento del 10,7% superando por primera vez a los 32 millones de botellas.

En posición destacada están los cavas de producción ecológica que han crecido un 48,17%, en cuanto al mercado interior crece un14% y el exterior un 5,1%
Por lo tanto se desea, es que estos espumosos sean un valor añadido y un reto al futuro y para eso se necesita invertir en imagen y márquetin. 


Por otro lado, la unión de seis cavas de renombre quienes han sacado un nombre colectivo “Corpinnat” y que la presentaron la semana pasada en Sant Sadurní como la marca colectiva de la Unión Europea, quienes quieren impulsar el prestigio de los vinos espumosos del corazón del Penedès y que quieren integrar a elaboradores del territorio que avalen los estándares de calidad que exige el nuevo reglamento de uso: cosecha manual, uva ecológica certificada, utilización de variedades históricas vinificación íntegra a la propiedad, crianzas superiores a los 18 meses y un precio mínimo garantizado al viticultor con un incremento gradual en el precio durante los próximos cuatro años.
Para el mes de octubre saldrá al mercado y se podrá disfrutar de las primeras botellas con ésta marca, que figurará en un lugar central de la etiqueta de los espumosos elaborados por las bodegas adheridas.